Caracteres de los racimos de la vid
Continuamos con la serie de post especializados en vid.
Estos post son destinados a mejorar las calidades descriptivas de las variedades que se cultivan y para el mejor entendimiento de las descripciones realizadas, es por tanto un ejercicio de ingenieria y lenguaje.
Haré una descripción de las cepas, sarmientos, hojas, flores, racimos y uvas.
RACIMOS
Son un conjunto de flores o frutos sostenidos por un eje común, y con pecíolos casi iguales, más largos que las mismas flores;
Los racimos de la vid atendiendo a sus caracteristicas pueden ser:
- Muchisismos
- Muchos
- Bastantes
- Pocos
- Muy Pocos
- Muy grandes
- Grandes
- Medianos
- Pequeños
- Muy pequeños
- Cilindricos
- Aovado-cilindricos
- Cilindrico-conicos
- Aovado-conicos
- Casi globosos
- De forma irregular
- Sencillos
- Compuestos
- Recompuestos
- Partidos en dos
- Con los gajos muy cortos
- Con los gajos cortos
- Con los gajos medianos
- Con los gajos largos
- Con los gajos muy largos
- Sumamente apretados
- Muy apretados
- Bastante apretados
- Algo apretados
- Flojos
- Muy Flojos
- Con agracejo
- Muchisimo
- Mucho
- Bastante
- Poco
- Muy poco
- Sin agracejo
- Con uva menuda
- Muchisima
- Mucha
- Bastante
- Poca
- Muy poca
- Sin uva menuda
- Pezón muy largo
- Pezón largo
- Pezón mediano
- Pezón corto
- Pezón cortisimo
- Pezón sumamente corto
- Pezón muy grueso
- Pezón grueso
- Pezón medianamente grueso
- Pezón delgado
- Pezón mut delgado
- Pezón duro
- Pezón correoso
- Pezón tierno
- Pezón verdoso
- Pezón pardo
- Pezón negruzco
A continuación añadiré las conclusiones del Estudio preliminar de la compacidad del racimo de la vid realizado por Natalia Laguna Ullán:
El análisis de la variabilidad intervarietal de la compacidad del racimo de la vid en las variedades seleccionadas, mostró que la causa mayor de la diferencia de compacidad entre racimos reside en la longitud de los racimos, como consecuencia de la largura de los primeros entrenudos y del número de nudos del raquis.
El segundo factor resultó menos importante pero a la vez destacable, y consistió en el número de bayas total del racimo, consecuencia del número de flores inicial y de la tasa de cuajado.
En cambio, las dimensiones de la baya no parecieron influir en la compacidad final de los racimos, pero sí el número de semillas de cada baya.
El análisis de la variabilidad intravarietal de la compacidad del racimo de la vid en clones seleccionados, mostró resultados diferentes entre las variedades Tempranillo y Garnacha, y también se diferenció parcialmente del análisis anteriormente citado.
Los clones seleccionados de la variedad Tempranillo mostraron que la mayor diferencia de compacidad en sus racimos residió en el número de bayas final, no mostrando diferencias relevantes en la longitud de los racimos de diferente compacidad.
La anchura y peso de la baya unitaria sí mostraron una ligera relación con la compacidad, siendo más importante el efecto del número de semillas de la baya, que se relacionó con un aumento de la compacidad.
Los clones seleccionados de la variedad Garnacha mostraron que la mayor diferencia de compacidad en sus racimos fue debida al número de bayas total del racimo, muy influido por la existencia de corrimiento, siendo en principio una causa genética en este caso.
La longitud total del racimo no se correlacionó con la compacidad en los clones de Garnacha, pero sí lo hicieron la longitud de la mayoría de los primeros entrenudos del raquis, disminuyendo la compacidad según aumentaba su longitud.
También se observó una relación de las dimensiones de la baya (fundamentalmente la longitud) con la compacidad. Asimismo aparece relacionada el número de semillas por baya, como en los dos análisis anteriores.
El estudio intravarietal por pares de clones permitió seleccionar 6 parejas de clones que se diferenciaron mayoritariamente en uno solo de los factores estudiados: longitud del racimo (longitud entrenudos y número de nudos), número total de bayas y dimensiones de la baya.