Fecha de recoleccion manzana y pera Coloracion epidermis Dureza
Las manzanas y las peras, cuando llega la maduración, pierden progresivamente su color verde, debido a la clorofila, al tiempo que los pigmentos amarillos, se van haciendo visibles poco a poco. La evolución del color de un fruto, puede medirse en un laboratorio, por la cantidad de clorofila y de otros pigmentos del fruto.
Se utilizan dos métodos, no destructivos, para realizar la medición de evolución del color:
- – Colorímetros triestímulos, de los que existen numerosos sistemas de medidas, homologados por la Comisión Internacional de la Iluminación (CII), aunque el más utilizado es el sistema “L.a.b”. Los inconvenientes de estos colorímetros, son; que no todos responden a las mismas normas de la CII, por lo que es necesario precisar la marca, el tipo de aparato, el modo de graduación, etc.; y además son aparatos, que debido a su precio, no están al alcance de todos
- – La evaluación por referencia, a colores simples, establecidos con la ayuda de un colorímetro y recopilados en los códigos de colores o escala colorimétrica. Tienen la ventaja de que cualquier persona puede manejarlos y su costo es mínimo, y el inconveniente es, que sería necesario, una escala para cada especie y para cada variedad.
En las variedades bicolores, el color del fondo del fruto, es un indicador de la madurez, mejor que la coloración roja, aunque evolucionan con frecuencia de forma paralela.
La regresión de la clorofila y la aparición de colores amarillos, en el fondo de la superficie de los frutos, responde a una evolución fisiológica irreversible, incluso después de la recolección, mientras que la presencia de pigmentos rojos, puede ser debida, a elementos exteriores a la madurez del fruto, como el suelo, el microclima, el vigor del árbol, la posición del fruto en el árbol, las temperaturas nocturnas, etc.
Aunque el color, es un elemento útil, para determinar la fecha de recolección, de numerosas variedades amarillas o bicolores, también puede variar, en función de parámetros externos e internos del fruto, modificando el contenido en nitrógeno del fruto, por ejemplo, se puede alterar el color.
Dureza de los frutos.
La dureza, está en relación directa, con la cohesión de las células de la pulpa y el espesor de sus membranas.
Cuando los frutos son jóvenes, las células permanecen compactas entre sí, debido a la propectina, que es como el “cemento” que las une y las hace compactas, a medida que el fruto avanza en madurez, la propectina, que es insoluble, se convierte en pectinas solubles, lo que provoca, que la pulpa se ablande y reduzca el fruto su resistencia a la presión.